sábado, 24 de diciembre de 2011

3ª participante del concurso, Marina

Bienn, ya hay otra participante, os recuerdo que solo sois 3 en total, y que como mínimo han de ser cuatro ¬.¬' estoy algo decepcionadilla porque casi nadie se ha apuntado -.-' y la verdad yo había hecho este concurso con toda la ilusión del mundo y al final me encuentro con nada de participación, y comentarios últimamente no hay como antes, pero no os voy a pedir más, sinceramente, tampoco os voy a exigir nada -.-
Os dejo el relato, que os aproveche:

 
LOS MAGILI
El metro está lleno, ya no quedan sitios para sentarse y apenas para estar en pie. Ella lleva un buen rato en el metro y está sentada, con una botella en una mano y un bote de pintauñas en la otra. La gente mira con curiosidad la botella vacía y se preguntan qué hará con eso. ¿Reciclarla? Puede.
Cuando el metro para, ella baja abriéndose paso entre la multitud, dando golpes en la espalda de unos y pisando los pies de otros. Varios se giran pensando que es una maleducada, pero a ella le da igual, ya que tiene prisa.
Sube las escaleras mecánicas como si fuesen normales, y cuando ve la luz del sol, cierra los ojos y respira hondo. Se queda parada unos instantes, pensando en su querida Barcelona, y que le quedan pocas horas de disfrutar de la bella ciudad.
Se dirige hacia una calle oscura y sucia, llena de gatos  negros que la miran fijamente. Se agacha y acaricia uno de ellos. Se levanta con esfuerzo y se siente mareada. No sabe si es por el olor de la calle o por su salud, puede que por las dos cosas. Además, pensar en su jefe, el señor Crock, le marea más aún.
Sale de la calle con paso decidido, diciéndose que lo que hará es por el bien del mundo y que las personas estarán mejor sin ella. Cuando por fin llega a la oficina del señor Crock llama al timbre con manos temblorosas.  Le abren sin contestar, empuja la resistente puerta de madera y huele el familiar aroma de orquídeas. El señor Crock es viudo, y quiere recordar a su mujer. Su apodo era la mujer de las orquídeas, por eso el señor Crock pone ambientador con olor a orquídeas.
En la oficina hay tres pisos. Ella tiene que ir al tercer piso, y tiene que pasar por 133 escaleras de mármol. Es el ejercicio físico de cada día. Después de subir las 133 escaleras, se encuentra con la puerta del despacho del señor Crock abierta. Da unos golpecitos en la puerta y la grave voz de su jefe le da permiso para pasar.
-Buen día, señor-le saluda ella.
-Buen día, Juliette. ¿Has traído lo que te he dicho?-contesta el señor Crock. Juliette le contesta con un cabezazo-. ¿Estás preparada?
Ella vacila, no sabe qué responder. ¿Está preparada para la muerte? ¿Está preparada para sacrificarse por toda la humanidad?
-Juliette, sabes que eso no es exactamente morir-le dice su jefe tranquilamente.
Los ojos de la joven se están nublando y le duele la cabeza. El mareo vuelve y ella siente que sus piernas están dejando de soportar su peso.
-Juliette, ¿tienes miedo?
-¿Miedo a la muerte? Tengo miedo de que el viaje no salga bien. Entonces todo estará perdido. Y más con mi salud, estoy heredando todo lo malo.
-El viaje saldrá bien y te reencontrarás con tu familia-le tranquilizó el señor Crock. Después de todo, no era tan temible y tenía sentimientos.
-Hay muchas cosas que no entiendo, señor-le contestó ella.
-Tu madre pasó por el mismo trayecto que tú. Mientras ella se entrenaba para el viaje, yo me estaba preparando para educarte a ti.  Ella te lo explicará.
Juliette, un poco más tranquila, diposita la botella vacía en la mesa blanca de su jefe. Abre el bote de pintauñas y tira los polvos que hay dentro en la botella. El señor Crock le dice, por última vez:
-Que vaya bien el viaje, Juliette. Has sido muy buena magili.
Entonces, Juliette pone su dedo en el cuello de la botella, y se desintegra delante de su jefe.
Sabe que el trayecto puede durar horas, días incluso. Tiene mucho tiempo para reflexionar, pero ahora ya está hecho.
¿Por qué le ha tocado a su familia ser de los magili? Esa tribu mágica que cuando nacen dan buenas noticias pero que cuando crecen todo son catástrofes…Por eso están destinados a ser enviados a otro universo. Muchos magili mueren en el camino, y ellá está segura que será de esos.
Los magili suelen estar tristes, ya que están separados de su familia. La mayoría de ellos marchan cuando tienen dieciséis años, la edad perfecta para el trayecto. Si marchan antes, son demasiado fuertes para pasar por el delicado puente de hojas de cedro. Si marchan después, son demasiado débiles para soportar la presión de la puerta de hierro. Aun así, marchar a los dieciséis años no asegura la vida, y menos si la salud es débil.
Hay la posibilidad de quedarse en la Tierra. Esos magili acaban suicidándose de tristeza, por eso muchos prefieren intentar ir al universo que les toca.
Mientras piensa eso, no se da cuenta de que hay un anciano con un columpio.
-Nueva magili. ¿Tienes el pase?
Oh, no, se lo ha dejado. Eso significa muerte segura. El pase es un collar que asegura que eres un magili al que le han dado el permiso para irse al otro universo.  Juliette empieza a llorar de rabia. El anciano le mira con ojos bondadosos, y le pone su mano en la espalda.
-Las lágrimas aseguran que tú tienes el pase.
Entonces, con el dedo, coge una lágrima de la mejilla de Juliette y la invita a sentarse en el columpio. Antes de que Juliette pueda agradecer el gesto, ya está volando a velocidad supersónica para encontrarse con el puente de hojas de cedro.
Ve el puente y baja allí mismo. Empieza a pensar cómo cruzar, y entonces se le ocurre una idea. Se colgará de las hojas, que están sujetadas por una rama. Sí, saldrá bien. Se agacha y se coge de la rama. Pasito a pasito y buena letra, se dice. Más vale maña que fuerza, se repite una y otra vez. Los refranes siempre le han dado ánimos para los momentos difíciles.
Al final, llega a la puerta de hierro. Está asustada, es el paso más difícil. Se necesita muchísima fuerza de voluntad para superar la puerta. Empieza a pensar el hechizo que le han enseñado a la vez que piensa “quiero ir”.
-Kuskma, kuskma, kuskma-empieza susurrando el hechizo y acaba gritándolo. La puerta de hierro se alza un poco, y ella, con su escurridizo cuerpo de anguila, pasa por debajo.
Hay un jardín verde lleno de árboles. Casitas blancas abundan, y con sus ojos marrones como el chocolate observa el bonito paisaje. Se para a pensar, y grita de alegría.
-¡HE SUPERADO LA PRUEBA!
Su madre oye la voz, y va corriendo a recibir a su  hija. Detrás va su padre, un gran mago. Se abrazan de alegría.
-Tenéis que explicarme muchas cosas-les suplica Juliette cuando llegan a la casa blanca cerca del manzano.
-Sí, claro.
Abren la puerta, que es de color azul y con el pomo plateado. Las paredes interiores de la casa son blancas, azul clarito, verde pastel…Es muy agradable. Antes de que Juliette pueda preguntar algo, su madre ya empieza a explicarle.
-Los magili dejamos una alma en el mundo y, una vez dentro del universo magili decidimos cuándo nacerá. Seguro que te estabas preguntando eso-le dice sonriendo su madre.
Su padre le explica cómo superó el puente de hojas de cedro, y Juliette se sorprende al oír que hizo exactamente lo mismo que él.
Juliette está feliz, observa la casa y corre por los pasillos como una niña pequeña.
Una vez en el universo magili, aprenderá hechizos, rituales…Juliette estaba deseando llegar al universo magili para hacer clases mágicas.
Su madre le da unas pastillas multicolor diciéndole que fortalecerán su salud.
-Tenía miedo de morir en el camino, es más, estaba segura que moriría-confiesa Juliette.
-Eres muy valiente. Has demostrado coraje e inteligencia-le contesta su padre, orgulloso de ella.
Juliette sonríe.
-Tengo que haceros una pregunta…¿Qué clase de persona es el señor Crock?
Sus padres empiezan a reír, y su madre contesta:
-Él es de la tribu de los magoli, son los mentores de los magili y siempre parecen un poco malos. Es buena persona, ¿verdad?
-Sí, sí, pero estaba intrigada-dice Juliette sonriendo. Está feliz, todo está en orden.
FIN

2 comentarios:

  1. Hola!

    Que buen relato Marina! =D
    Lo siento Lectora estas semanas he estado un poco liada pero, si todavía aceptas relatos, haré el mío y te lo mandaré esta semana =)

    Muchos besitos!!

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